El paisaje de diferentes tonos de verde, caseríos de la campiñas de color tierra y el olor de la mañana y  un dibujo en la pared que decía “BIENVENIDOS A OCÚ”, era lo que nos esperaba, con gritos de júbilo y alegría una cantidad de niños y niñas de distintas edades, quienes se presentaron para los Talleres Artísticos Creativos y Pictóricos, que tenían organizados los artistas panameños José Arrocha V, Gilberto Mendieta y Rubén Contreras, de la Dirección de Cultura de la Vicerrectoría de Extensión.

      Esta actividad se realizó del 12 al 14 de septiembre en la Casona de Ocú, casa centenaria de la familia Núñez Castillero, que dirige la Tía Matilde Núñez, como cariñosamente le llaman los niños de la comunidad.  Ella es una distinguida ciudadana ocueña, preocupada por el desarrollo de la cultura y la promoción en este lugar.

        En este semillero de las artes, los niños estaban ansiosos de tomar en sus manos los lápices, pasteles, tizas y pinceles para mezclar y jugar con los colores, volar su imaginación y convertirlas en imágenes e integrarlo en forma de diálogo auténtico a su espontánea forma de expresión. También se les motivó con dinámica corporal para desarrollar el arte con juego y el movimiento, actividad que consiste en una sucesión de elementos artísticos y de movimiento físico donde la imaginación busca un producto mágico en el lenguaje propio, para que finalmente se plasme en las obras y así crear cada uno su concepto.

 
        Los niños pintaron sobre piedra, totuma, batea; jugaron; se mancharon sus cuerpos; aprendieron las diferentes formas e imágenes con el color; hicieron modelos para un proyecto mural que se convirtió en un taller, ya que se combinó con dinámicas de grupo motivándolos a sentirse relajados y alegres, para cuando iniciaran la pintura del majestuoso mural.